miércoles, 15 de noviembre de 2017

VOZ DE FÁTIMA, VOZ DE DIOS N ° 37


4 de noviembre de 2017
" Vox túrturis auditorías se muelen en nostra"       
(Cant. II, 12)

En la fiesta de Cristo Rey, el 29 de octubre de este año, entre 150 y 200 peregrinos asistieron a la misa de monseñor Williamson en Fátima. Al final de ella, los cuatro obispos de la Resistencia consagramos a Rusia al Inmaculado Corazón de María, haciendo lo que está a nuestro alcance para atender a los pedidos de Nuestra Señora.

Consagrar a Rusia al Inmaculado Corazón es pedir la gracia del retorno, al seno de la Iglesia, de esta nación que se separó de ella por el cisma. Si Nuestra Señora dijo que en Portugal se conservará siempre el dogma de la fe, esta consagración debe tener el efecto de reconducir a Rusia al dogma de la fe. En efecto, el cisma, al alejar a una nación de la Iglesia, la aleja también del Magisterio y, por tanto, de la fe.

Que este pequeño esfuerzo hecho en pro de la conversión de Rusia nos merezca la gracia de guardar el dogma de la fe en nuestras almas y de colaborar para el triunfo de la Iglesia, no sólo sobre el cisma del oriente, sino también y sobre todo, sobre el liberalismo y el modernismo que se oponen al reinado de Cristo Rey sobre todos los pueblos.

+ Tomás de Aquino OSB

U.I.O.G.D.